Israel olive varieties and technologies on Indian desserts

Driving southeast of Bikaner, Rajasthan, all that meets one’s eyes is the sand and shrubs. Vegetation is scarce, agriculture of any kind non-existent and the only green one can see are a few patches of grass in the sand. Two hours ahead, taking a left from the NH-65, on the road to Didwana, the dry brown landscape suddenly changes colour. Olive trees, around 14,000 of them spread across 30 hectares, dot the desert land. This is the Bakliya farms, one of seven such farms in Rajasthan, result of an Indo-Israeli agricultural venture.
It started with Vasundhara Raje’s visit to Israel in 2006. The sight of an olive farm in a kibbutz in the Negev desert of southern Israel struck the former Rajasthan chief minister as something that could be replicated in her state. On her request, the Israel government agreed to help set up olive groves in Rajasthan, a hitherto failed experiment in India. The Israelis had developed a technology through intensive plantation and drip irrigation that allowed them to grow olive on arid land. Exactly what the then chief minister wanted for her dry state..
The Rajasthan Olive Cultivation Limited (ROCL) was set up as a public-private partnership with investments from the Rajasthan government and expertise from Indolive, an Israeli olive farming company and Pune-based irrigation equipment manufacturers, Finolex Plasson Industries. In the next six years, seven areas in the state were selected for growing seven varieties of the plant. Cuttings of high yield olive plants were imported from Israel. Drip irrigation, another Israeli invention and a common Indian practice now, was also used. Fertilisers, cutting techniques, soil testing — all the expertise came from Israel.
Barnea olive variety

Of the seven varieties they planted, Barnea olive variety had been the most successful.

The results have been quite impressive. Of the seven districts where the olive experiment took place, four have done well. Buoyed by the success, the Rajasthan government has declared huge subsidies — 75 percent on plant cuttings, 3,000 per hectare on fertilizers and chemicals, and 90 percent on drip irrigation — to promote olive plantation in the state. An olive oil refinery is also coming up in Lukhransar, north of Bikaner.
The Rajasthan experiment has also given Israel the impetus to expand into other agriculture and horticulture segments across India. The technologies to be transferred include irrigation, soil solarisation for disease control in plants, polyhouse farming, fertilisers, hybrid plants and seeds. While Israel has already entered into agreement with seven state governments to set up these centres, the most successful model has been Haryana.

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Aceitunas variedad Barnea: Desde Israel a paises no mediterráneos

Aceitunas variedad Barnea
Es una variedad originaria de Israel, país donde se cultiva en una superficie elevada. Ha sido difundida en zonas olivícolas del mundo con características de aridez e incluso de desertización, y en áreas con “salinidad” en el terreno o en el agua de irrigación.
En la Argentina fue introducida hace 5 ó 6 años en las nuevas plantaciones de la región oeste del país. La bibliografía no menciona que se la conozca con otra denominación o sinonimia.
Esta variedad se emplea para conserva o aceite (Uso dual).
El árbol es vigoroso. Las ramas primarias tienen fuerte tendencia a la verticalidad. En los primeros años después de la plantación, la planta crece con mucha fuerza y alcanza la altura máxima en poco tiempo. La copa es poco densa y no es de forma globosa como la mayoría de las variedades, más bien se observa como forma cónica y alargada. Esta característica ayuda bastante para poder identificarla. Las ramas fructíferas son cortas, muy bien distribuidas y poco espaciadas. Por el porte natural del árbol es una de las que mejor se adapta a la cosecha y poda mecánica. Responde muy bien cuando se decide a conducirla por el sistema “monocono”. Es una variedad ideal para plantarla en alta densidad.
Florece a mitad de temporada, lo hace abundante y registra muy bajo porcentaje de aborto ovárico. Cuaja muy bien y es considerada una variedad de alta producción. Si bien merma la producción de un año a otro, esta “vecería” no es muy notoria. Las flores son auto compatibles (no necesita polen de otra variedad para fructificar). Es muy precoz para entrar en producción.
El fruto es de buen tamaño de 4 a 5 gr., por eso se sabe utilizar para conserva. La forma es ovoide alargado. El fruto de Barnea es fácil identificarlo porque a simple vista y al tacto la piel se presenta como “ampollada”.  De aspecto rugoso cuando es verde, alisándose ligeramente con la maduración (en general).
Tiene un color amarillento claro (en verde) y un rosa violeta muy bonito cuando es cambiante (Clase 3 y 4 de Índice de madurez).
Sin embargo, esta variedad presenta ciertos problemas serios (en países como Perú, Australia etc) en relación con la calidad de las aceitunas de mesa en dos de los atributos principales que toda variedad de mesa debe cumplir:
·         La textura de la pulpa es blanda, acrecentándose la falta de consistencia con la maduración, de forma que resulta muy blanda en preparaciones de aceitunas naturales, ya sean negras como cambiantes. También se aprecia este defecto  en aceitunas verdes en salmuera,
·         Manchas: Presenta un elevado porcentaje de daños de cosecha, que no son habituales de otras variedades, incluso en recolección a maño (por ordeño) y de forma cuidadosa, se encuentran lotes con defectos generalizados.
Parece que al hacer presión  contra otros frutos durante la recogida, se desencadenase una reacción enzimática con pardeamiento que además tiene como resultado el reblandecimiento de dicha zona presionada. (No debe tratarse de un ataque por hongos, ya que se trata de plantaciones en zonas muy áridas o desérticas con bajo nivel de irrigación).
Es considerada una variedad “rústica” porque se adapta a una variedad de climas. Es resistente al frío y a las heladas fuera de época.
El rendimiento en aceite es bueno (18 al 22 %), algo afrutado, con buena estabilidad y muy bien aceptado por los consumidores no habituales.

Olivicultura en Urugüay: Algo más de una década de continuo crecimiento

Olivicultura en Urugüay

Urugüay ofrece condiciones naturales de cultivo similares a la cuenca del Mediterraneo, la cuna de la olivicultura. Existen plantaciones de olivos que datan del siglo XIX y gozan de una buena salud en la actualidad.
En la década del 50 se emplazaron nuevas plantaciones y su fruto y/o aceite obtenido se exportan inclusive a Europa. Se estima que la extension cultivada de estos «olivos» centenarios es de  unas 550 ha.
A partir de 1998 y especialmente desde 2003 cobró auge la olivicultura en el pais, procediéndose a la plantación de los árboles, tanto para la obtención de Aceitunas de Mesa de primera calidad como para la elaboración de Aceite de Oliva Extra Virgen.
Actualmente hay unas siete mil hectáreas de olivos sembradas en nuestro país y aunque todo el Uruguay es apto para el cultivo, hay zonas en donde se han concentrado las plantaciones; eso no significa que se corresponda a las zonas más idóneas.
Las zonas con más hectáreas plantadas de mayor concentración son Maldonado, Rocha, Treinta y Tres y Lavalleja. Entre todas concentran el 80% de la superficie sembrada. El principal motivo de esa concentración es la disposición de terrenos aptos, pero principalmente a la influencia de inversiones extranjeras que por la cercanía con Punta del Este comenzaron a desarrollar el negocio en esa zona.
En Uruguay hay entre 80 y 100 productores que comprenden desde los muy pequeños de unas 20 a 400 hectáreas, hasta empresas muy grandes, todos ellos asociados. Las áreas cultivadas de mayor envergadura tienen incorporada una zona para almazara. En algún caso, ya se está explotando una instalación industrial de Aceitunas de Mesa.

Cultivo
Los métodos de cultivo son de regadío, con riego automatizado, y de secano, sin riego automatizado. En el cultivo de secano se requiere una precipitación mínima de 700 mm.
En Uruguay el promedio anual de lluvias es de 1.200 mm. Sin embargo hay que prestar especial atención a la previsión de riego manual para los meses más secos, donde pueden pasar más de 10 días sin llover, para obtener un mayor rendimiento de los árboles.
La densidad de plantación depende de la variedad y del método de cultivo aunque los principales viveristas urugüayos sugieren 300 árboles por hectárea. Para esto, los árboles se colocan a intervalos de 7 mts. entre las filas y 5 mts. de separación en cada fila.

El árbol comienza a dar frutos a partir del 3er. año y llega a su adultez al 9° año, con una producción estimada en 13.000 a 15.000 kg/há.

Variedades: Se han adaptado 3 grupos:
  • Variedades eminentemente aceiteras: Arbequina y Picual (oriundas de España), Leccino y Frantoio (de origen italiano).
  • Variedades de doble uso como: Barnea (de origen israeli) y Picholine (de origen francés)
  • Variedad de mesa: Manzanilla (originaria de España
En Urugüay se plantan variedades para la producción de aceite en forma mayoritaria, pero se cultivan las que son de doble propósito, y las que producen aceitunas de mesa
La variedad más plantada en Urugüay es la Arbequina, que comprende el 50%del total de plantaciones, variedad de origen español que se adapta muy bien a los diferentes entornos. Luego, le siguen en orden de importancia, Manzanilla, Picual, Leccino, entre otras. La mayor parte de la producción se destina al aceite de oliva y otra al aceituna de mesa.

En Urugüay, el consumo de aceitunas de mesa se calcula en 1.800 toneladas anuales. Esto representa un consumo de unos 600 grs. por habitante y por año. Al comparar este dato con el consumo en Europa (3 kg por habitante por año) se observa un gran potencial de crecimiento

Fuentes: Varias (http://www.asolur.org.uy/)